Corrían 20 minutos del segundo tiempo en el Estadio Centenario de Quilmes, cuando fue el momento del ingreso al partido de Jeremías Merlo en lugar de Alan Sosa. En el tiempo que jugó, alternando buenas y malas, demostró que quiere ganarse un lugar en el cotejo de Copa Argentina.
Más allá de que por sus características y de haber nacido en el barrio de Los Hornos, se cae de madura la comparación con Benjamín Domínguez, Merlo está haciendo su historia en Gimnasia, donde la idea es llevarlo de a poco más allá de las buenas sensaciones.
Cabe recordar que le tocó debutar ante Newell’s de la mano de Marcelo Méndez en la pasada Liga Profesional, donde luego de 30 minutos en juego, sufrió una lesión muscular que lo privó terminar de buena manera la temporada pasada, pero donde llegó a demostrar algo de todo lo que puede dar, y lo que no le privó de disfrutarlo: "Fueron los 30 minutos más felices de mi vida", remarcó en aquel entonces.
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Jeremías Merlo sigue sumando minutos en Gimnasia.
Lo cierto, es que luego de recuperarse y de llevar a cabo la pretemporada junto al resto del plantel, se convirtió en una fija en el banco de suplentes, y más allá de las variantes con las que cuenta el equipo y de los jugadores que llegaron y pueden llegar, quiere hacerse su lugar.
También le tocó firmar su primer contrato en un 20024 lleno de emociones para él, el cual tiene mucho tiempo por delante si se tiene en cuenta que durará cuatro años, es decir que tiene una extensión hasta diciembre del 2028, cuando el jugador cumpla los 22.